
La verdad es que me quedo de piedra. Siempre he sostenido que el verdadero candidato a sustituir a Francisco Camps en la Generalitat Valenciana sería el alcalde de Castellón, Alberto Fabra (no confundir con Carlos Fabra, alias D. Fabriccio) ya que es un hombre con sufienciente patrimonio como para pagarse sus trajes y no tener que contar luego mentiras que le lleven a dejar por los suelos la institución que representa. Pero bueno, ya se sabe que esto de la soberanía popular es algo relativo y no solo porque el artículo 6 de la Constitución circunscriba el sufragio al voto de los partidos como única expresión de dicha soberanía, sino porque en España lo de la democracia interna de los partidos es algo como para llorar.
Así que si el Sr. Rajoy o Cospe quieren que Juan Costa sea nuestro Presidente de la Generalidad, pues nada, ya saben los súbditos populares que tendrán que refrendar lo que diga los capitostes de Génova.
Y así nos va, entre genoveses, fabriccios, madrileños y catalanes, que estos también tocan en todas las orquestas, más si el PP necesita de su apoyo para gobernar España. Las facturas que nos queda por pagar aún a los valencianos!
Comentarios
Publicar un comentario