Ni es oro, ni somos punteros, ni esto es el jardín de "pin y pon". La agencia de calificación crediticia Moody's ha rebajado la nota de solvencia de la deuda de la Comunidad Valenciana como consecuencia de las "amplias desviaciones" registradas respecto a los límites de déficit establecidos para 2010 y las consecuentes dificultades que la calificadora de riesgos prevé que encontrará la Generalidad para controlar sus desequilibrios fiscales y su deuda entre 2011 y 2012.
Esto significa que La Comunidad Valenciana pierde prestigio financiero, nuestra deuda es de mayor duda de cobro, y las inversiones extranjeras se lo van a pensar mejor antes de recalar por estas tierras.
Los que me llamaban alarmista cuando un servidor denunciaba que la Generalidad Valenciana está endeudada en más de 45 mil millones de euros, (5 veces por encima de la media del resto de comunidades de España) verán ahora que no era ni electoralismo ni catastrofismo. Hemos perdido las Cajas Valencianas que han sido absorbidas por las asturianas y las castellanas CAJASTUR y CAJAMADRID, fruto de la mala gestión y el despilfarro político.
Por este motivo y por el derroche institucional, las inversiones ruinosas, tanto coche oficial, canal 9, tarjetas y Gürtels es lo que, al final, nos obligará al resto de ciudadanos valencianos que no estamos en política, a pagar la deuda y platos rotos de nuestros gobernantes autonómicos y nacionales.
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