
En mi próximo libro EL PALACIO REAL, Crónica viva del Reino de Valencia, cuento sobre la magnificencia, grandeza y esplendor del que fue nuestro Palacio Real, demolido durante la invasión francesa en 1810 y que estaba levantado en los Jardines de Viveros o “del Real”.
El Palacio Real era la residencia de los reyes y virreyes del Reino de Valencia i Aragón y contaba con 300 aposentos, motivo por el cual se le llamaba el “palacio de las 300 llaves”.
El poeta valenciano Teodoro Llorente del siglo XIX le dedicó estas palabra: “¿Qué fue de ti, Palacio Real? Noble mansión de los monarcas valencianos, centro y símbolo de nuestro antiguo y glorioso reino (...) Desaparecido todo, con las instituciones que representabas, la autonomía ilustre de aquel reino del que fuiste cabeza...”
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