Quiero unir en esta reflexión la figura transcendental de Juan Pablo II y el 1º de Mayo porque una de las aportaciones intelectuales y espirituales más importante de este pontífice fue su encíclica “Laborem Exercens” en la que reclama la dignidad del trabajo frente a los conceptos socialista y liberal en el que las personas somos un mero engranaje de producción para el estado o para el capital. Cuando se publicó esta encíclica en 1981 edite un trabajo sobre la misma que me inspiró a la hora de redactar, 23 años después, el discurso fundacional del Coalicio Valenciana.
DISCURS FUNDACIONAL DEL NOU VALENCIANISME (Febrer de 2004): http://www.coaliciovalenciana.es/index.php/mosatros/discurs-fundacional
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